Lomo embuchado, ¿sube el colesterol?
El lomo embuchado es uno de los embutidos más apreciados en nuestra gastronomía. Su sabor intenso, su textura firme y su aroma inconfundible lo convierten en un manjar para los amantes del buen jamón y los productos curados. Sin embargo, una pregunta aparece con frecuencia entre quienes buscan cuidar su salud: ¿el lomo embuchado sube el colesterol?
En una época donde cada vez prestamos más atención a lo que comemos, muchas personas dudan si seguir disfrutando de este embutido tradicional. La respuesta no es tan sencilla como un sí o un no. Depende de la calidad del producto, del tipo de lomo utilizado y, por supuesto, de la cantidad que se consuma.
En este artículo, desde Lonchemur, te explicamos la verdad sobre la relación entre lomo embuchado y colesterol, las diferencias entre un lomo embuchado industrial y un lomo ibérico, y qué opciones tienes si quieres seguir disfrutando del sabor sin poner en riesgo tu salud cardiovascular.
¿Qué es el lomo embuchado?
El lomo embuchado es un embutido elaborado con una de las partes más nobles del cerdo: el lomo. Tras ser adobado con sal, pimentón y otras especias, se embute en una tripa natural y se deja curar durante semanas o incluso meses. El resultado es un producto magro, con bajo contenido en agua y rico en proteínas.
Aunque muchas veces se mete en el mismo saco que otros embutidos, como el chorizo o el salchichón, el lomo embuchado destaca por tener un contenido en grasa más bajo y un perfil nutricional más equilibrado. Pero, ¿eso significa que es inocuo para el colesterol?
¿El lomo embuchado sube el colesterol?
Como ocurre con muchos alimentos de origen animal, el lomo embuchado contiene grasas saturadas, que en exceso pueden contribuir al aumento del colesterol LDL (el colesterol “malo”). Sin embargo, no todos los lomos embuchados son iguales.
Un lomo embuchado industrial, elaborado con carnes de menor calidad y mayor proporción de grasa, puede tener un impacto negativo en tus niveles de colesterol si se consume con frecuencia y en grandes cantidades.
Por otro lado, un lomo ibérico de bellota, elaborado con cerdos criados en libertad y alimentados principalmente con bellotas, tiene un perfil graso diferente. Estos lomos contienen ácidos grasos insaturados, como el ácido oleico, que pueden incluso tener efectos beneficiosos sobre el colesterol.
¿Por qué puede afectar al colesterol?
El problema no está solo en la cantidad de grasa, sino en el tipo. Las grasas saturadas y los conservantes artificiales que suelen encontrarse en los productos más industriales pueden afectar negativamente a la salud cardiovascular. Además, algunos lomos embuchados llevan aditivos, potenciadores de sabor y un alto contenido en sodio, lo que también puede incidir en la presión arterial y el sistema circulatorio.
Por eso, no es solo cuestión de evitar el lomo embuchado, sino de elegir bien qué tipo consumir y en qué cantidades.
¿Es lo mismo que otros embutidos?
Lomo ibérico vs lomo embuchado industrial
A menudo se confunde el lomo embuchado con otros embutidos como el chorizo, el salchichón o el jamón cocido. Sin embargo, no todos los embutidos son iguales ni afectan del mismo modo al colesterol.
El lomo ibérico destaca por tener menos grasa y una mayor cantidad de ácido oleico, el mismo que se encuentra en el aceite de oliva. Esto lo convierte en una opción más saludable para quienes quieren cuidar sus niveles de colesterol.
En cambio, el lomo embuchado industrial, elaborado con cerdos de cría intensiva y con aditivos artificiales, suele tener más grasas saturadas, menos valor nutricional y un impacto mayor sobre el colesterol.
¿Es malo comer lomo embuchado si tengo colesterol?
No necesariamente. Si tienes el colesterol alto, lo ideal es moderar el consumo de todos los embutidos, pero no significa que debas eliminarlos por completo.
Puedes seguir disfrutando del sabor del lomo embuchado si:
- Optas por lomo ibérico de bellota, que tiene un mejor perfil graso.
- Lo consumes como parte de una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras y fibra.
- Evitas combinarlo con otros alimentos ricos en grasas saturadas.
- Lo tomas ocasionalmente, como un capricho o en ocasiones especiales.
¿Qué embutidos puedes comer si cuidas tu colesterol?
Fiambres y colesterol
Muchos fiambres procesados tienen un alto contenido en sodio y grasas poco saludables. El jamón cocido, la pechuga de pavo o el jamón serrano desgrasado pueden ser opciones mejores, pero siempre es recomendable mirar la etiqueta y evitar los que tienen azúcares añadidos, féculas o conservantes artificiales.
Embutidos saludables
- Lomo ibérico de bellota: bajo en grasa y rico en ácido oleico.
- Jamón ibérico de bellota: otro gran aliado si se consume con moderación.
- Cecina de vacuno: rica en proteínas y con menos grasa que otros embutidos.
- Pechuga de pavo natural: siempre que no sea ultraprocesada.
¿Qué embutidos comer si tengo colesterol?
Si tienes colesterol alto, lo más importante es elegir embutidos de calidad, con bajo contenido en grasas saturadas y sin aditivos artificiales. El lomo ibérico es una de las mejores opciones, especialmente si proviene de una empresa que prioriza la calidad, como Lonchemur.
La clave, una dieta sana y equilibrada para poder comer de todo
El lomo embuchado no tiene por qué ser tu enemigo si estás cuidando tu colesterol. La clave está en saber elegir y no abusar. Un lomo ibérico de calidad, consumido con moderación, puede formar parte de una alimentación saludable, incluso si tienes niveles de colesterol elevados.
En Lonchemur, apostamos por productos artesanales y de alta calidad, pensados para quienes valoran tanto el sabor como el bienestar. Porque cuidarse también puede ser un placer.
¿Quieres saber más sobre nuestros productos ibéricos?
Visita nuestra tienda online o contáctanos para descubrir cómo podemos ayudarte a disfrutar de cada bocado sin renunciar a tu salud.
